La tecnología de paneles solares se abre paso en interiores para alimentar una serie de dispositivos inteligentes, abriendo nuevos horizontes a las soluciones energéticamente eficientes.
Los investigadores han explorado el potencial de los sistemas fotovoltaicos para su uso como iluminación de interiores.
Aunque las células solares están diseñadas para convertir eficazmente la luz solar en electricidad, hasta ahora no se habían optimizado para aplicaciones de iluminación en interiores. Para colmar esta laguna, el físico Uli Würfel y sus colegas se propusieron probar los materiales fotovoltaicos más eficientes para convertir fuentes de luz no naturales en energía eléctrica.
Los investigadores probaron ocho tipos de dispositivos fotovoltaicos. Las células fotovoltaicas basadas en fosfuro de indio y galio se llevaron la palma, con una eficiencia del 40% en interiores. En cambio, el silicio cristalino mostró una eficiencia excepcional bajo la luz solar y media en interiores. Sin embargo, utilizar fosfuro de indio y galio para alimentar sistemas domésticos inteligentes es caro. En cambio, los minerales de perovskita y las células fotovoltaicas de película orgánica ofrecen alternativas rentables. Además, presentan una mayor estabilidad en condiciones de iluminación interior.
El estudio aportó información valiosa sobre la conversión de la energía luminosa en interiores: reveló que parte de la energía luminosa se disipa en forma de calor en lugar de convertirse en electricidad. Estos conocimientos serán cruciales para optimizar las futuras tecnologías fotovoltaicas.
Aunque las células solares están diseñadas para convertir eficazmente la luz solar en electricidad, hasta ahora no se habían optimizado para aplicaciones de iluminación en interiores. Para colmar esta laguna, el físico Uli Würfel y sus colegas se propusieron probar los materiales fotovoltaicos más eficientes para convertir fuentes de luz no naturales en energía eléctrica.
Los investigadores probaron ocho tipos de dispositivos fotovoltaicos. Las células fotovoltaicas basadas en fosfuro de indio y galio se llevaron la palma, con una eficiencia del 40% en interiores. En cambio, el silicio cristalino mostró una eficiencia excepcional bajo la luz solar y media en interiores. Sin embargo, utilizar fosfuro de indio y galio para alimentar sistemas domésticos inteligentes es caro. En cambio, los minerales de perovskita y las células fotovoltaicas de película orgánica ofrecen alternativas rentables. Además, presentan una mayor estabilidad en condiciones de iluminación interior.
El estudio aportó información valiosa sobre la conversión de la energía luminosa en interiores: reveló que parte de la energía luminosa se disipa en forma de calor en lugar de convertirse en electricidad. Estos conocimientos serán cruciales para optimizar las futuras tecnologías fotovoltaicas.